En este mundo cada vez más digitalizado, las redes sociales han cobrado un papel protagonista en nuestra sociedad. Cada día está más de moda mostrar tu vida, o al menos, parte de ella, a través de una pantalla. Además, son una plataforma ideal para potenciar algunos trabajos, dar visibilidad a diferentes movimientos, conocer gente y entretenernos.
Pero… ¿qué está ocurriendo en las redes sociales?
La publicación de contenido ha pasado de ser una forma de estar en contacto con tus amigos a ser una búsqueda de aprobación, donde un like significa que gusto y que lo que hago está bien, actuando como un reforzador, y la falta de likes nos lleva a sentimientos desagradables y a la afección de nuestra autoestima.
Es casi inevitable, a veces, compararnos con lo que vemos en las redes, estilos de vida aparentemente perfectos y prácticamente imposibles de imitar. Esto hace que entremos en conflicto con nosotros mismos y nos provoque malestar al crearnos expectativas irreales.
Ahora, ¿qué debemos tener en cuenta?
Lo que a veces se nos escapa es que, lo que vemos en redes sociales, no es la realidad al 100%, es la parte bonita que nos quieren enseñar, al fin y al cabo, las marcas se publicitan a través de los llamados influencers, y nos enseñan escenarios que bien podrían ser de anuncio.
Entonces, ¿qué podemos hacer?
Para seguir disfrutando de lo bueno de las redes sociales y reducir lo malo que nos aportan, aquí van tres consejos clave.
- Primero, dedicar menos horas a mirar contenido, disfrutando de la vida más allá del teléfono.
- Segundo, seguir cuentas que nos aporten puntos positivos, que nos enseñen cosas nuevas y nos den contenido que nos llene.
- Y, por último y más importante, cuidar de nuestra salud mental trabajando nuestra autoestima y autoconcepto, desarrollando así un factor de protección que nos ayude a recordar nuestra valía.
Paula Tangarife. Psicóloga Hospiten Lanzarote.