La Unidad de Cirugía Cardiaca de Hospiten Rambla, liderada por el doctor Rafael Llorens, ha superado las 8.000 intervenciones desde su puesta en marcha en 1996, contribuyendo a mejorar los índices de supervivencia y la calidad de vida de este tipo de paciente en Canarias, donde las enfermedades cardiovasculares continúan siendo la principal causa de mortalidad, por delante del cáncer.
Estos datos consolidan la posición que ocupa este Servicio entre los más avanzados en la aplicación de técnicas pioneras en cirugía cardiaca y que, en el caso de Canarias, solo se desarrollan en el grupo sanitario Hospiten.
El Dr. Llorens León explica que la Unidad de Cirugía Cardiaca arrancó con un bypass coronario a un paciente procedente de Puerto de la Cruz en un contexto social en el que no habían referentes similares y la asistencia quirúrgica en esta especialidad en las Islas era limitada.
“Cumplimos 8.000 intervenciones considerados como un servicio de excelencia, gracias a la profesionalidad y los recursos materiales y humanos con los que contamos, concretamente, con un equipo médico compuesto por 15 facultativos con una experiencia y cualificación de primer nivel”, añade el especialista de Hospiten.
Referente en innovación
Durante la dilatada trayectoria de este Servicio destacan grandes hitos que han supuesto un antes y después en la cirugía cardiovascular. Entre ellos, la técnica conocida como ‘trompa de elefante congelada’, con la que se logra unificar dos complejas intervenciones cardiovasculares en una sola a través de una disección aórtica que supone una reducción considerable de los riesgos operatorios, disminuye la mortalidad y permite la mejora del paciente en un plazo de tiempo más reducido.
También en Hospiten Rambla se ha aplicado cirugía coronaria sin bomba, con más de 3.000 intervenciones utilizando únicamente injertos arteriales de arteria mamaria, que contribuye a reducir los riesgos de la intervención y acorta el tiempo de recuperación del paciente, al tiempo que permite mejorar los resultados a largo plazo, al usar injertos de arterias mamarias que evitan que con los años se obstruyan, en lugar de utilizar las venas como injertos.
Además, la Unidad de Cirugía Cardiaca de Hospiten ha sido pionera en la aplicación de técnicas, tanto quirúrgicas como híbridas, para el tratamiento de aneurismas de aorta, donde existe un grupo de profesionales especializados en el tratamiento endovascular (mínimamente invasivo) de esta patología; en la implantación de la prótesis aórticas stentless, es decir, sin las mallas extensibles que se utilizaban con anterioridad; o en la aplicación de métodos innovadores como válvulas cardiacas sin sutura en pacientes con estenosis aórtica, lo que reduce el tiempo de operación, facilita una recuperación más rápida y amplía las posibilidades de vivir más tiempo y mejor, sobre todo en los pacientes mayores de 80 años, para los que el método tradicional era muy agresivo.
Asimismo en la reparación de la válvula aórtica en pacientes con insuficiencia y aneurismas de aorta, sustituyendo la aorta y corrigiendo la insuficiencia actuando sobre los velos coronarios y el anillo aórtico, sin implantar una prótesis valvular.
En este sentido, el doctor Rafael Llorens León, como jefe de este Servicio, afirma que “la apuesta decidida por el Grupo Hospiten por esta especialidad nos ha permitido investigar, innovar y aplicar nuevos métodos con el objetivo principal de mejorar la salud y la calidad de vida de los pacientes con problemas cardiovasculares y contribuir a afianzar nuestra posición como un referente en la prestación de servicios médico-hospitalarios, en este caso desde la Unidad de Cirugía Cardiaca, al más alto nivel”.