La hiperhidrosis es un trastorno que se caracteriza por una excesiva sudoración que puede llegar a convertirse en un factor limitante en las actividades de la vida diaria. Los síntomas de la hiperhidrosis pueden comenzar en cualquier etapa de la vida, aunque, lo habitual, es que se comience a percibir en la adolescencia, cuando cambia la calidad de nuestras relaciones sociales y se suceden varios cambios hormonales que completan nuestro desarrollo.
En la mayoría de los casos, la hipersudoración está localizada en una o más áreas específicas del cuerpo, normalmente son las axilas, las manos o las plantas de los pies. También hay casos en los que la cabeza o el cuero cabelludo pueden verse afectados. En cualquier caso, la persona afectada, refiere una sudoración excesiva en situaciones que pudieran considerarse “normales” como el calor o el deporte o en otras, como situaciones emocionales o momentos de estrés. La enfermedad afecta por igual a hombres y mujeres y se calcula que su incidencia puede estar situada entre el 0.6% y el 2.8%.
Entre los tratamientos disponibles para la hiperhidrosis, se encuentra el tratamiento quirúrgico, la denominada simpatectomía.
La simpatectomía, es un procedimiento que se realiza por un abordaje mínimamente invasivo, con un riesgo muy bajo y con resultados inmediatos e irreversibles. Una vez realizado el procedimiento, no se pueden revertir sus efectos.
Para concretar si un paciente puede ser candidato a una simpatectomía, es relevante, en primer lugar, realizar un análisis de cada caso, evaluando, en la consulta, las áreas afectadas y la experiencia del paciente, así como el grado en que la hipersudoración afecta a su vida diaria. También , se valorará la posibilidad de que la hiperhidrosis sea primaria, es decir, que no se deba a un trastorno subyacente (hiperhidrosis secundaria) que precise otro tipo de tratamiento . Un ejemplo de esto sería, una hipersudoración debida a un hipertiroidismo no diagnosticado o a un medicamento que estemos tomando por cualquier otra causa. Una forma de distinción es cuando la hiperhidrosis afecta a todo el cuerpo de forma generalizada, en este caso, podríamos estar ante un caso de una hiperhidrosis secundaria. También es importante, que la persona candidata, entienda los pros y los contras del tratamiento quirúrgico para tomar una decisión informada.
La Dra. de Cabanyes aclara que, son las personas con una hiperhidrosis primaria aquellas que se pueden benficiar de un tratamiento quiúrgico.
Candidatos a simpatectomía
En síntesis, los pacientes que se pueden beneficiar de un tratatamiento quirúrgico de su hiperhidrosis son:
• Aquellos casos hiperhidrosis primaria (localizada en manos, axilas, plantas de los pies...)
• Aquellas personas que no tienen problemas de salud asociados.
• Aquellas personas con un peso estable y un índice de masa corporal inferior a 27.
Dra. Sara de Cabanyes. Cirugía Torácica.