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Hospiten incorpora la artrocentesis como la solución menos invasiva para tratar trastornos derivados de la Articulación Temporo-mandibular (ATM). Esta articulación, que conecta la mandíbula con el hueso temporal del cráneo, podría tratarse con una intervención quirúrgica de mínima incisión que reduce el daño a tejidos y mejora la recuperación de la zona.

La artrocentesis es una intervención quirúrgica que utiliza técnicas con mínima incisión para tratar trastornos articulares de la ATM, reduciendo el daño a tejidos y mejorando la recuperación. Es un procedimiento mínimamente invasivo, que se realiza de forma ambulatoria bajo anestesia local. Se usa en casos de bloqueo articular, dolor articular y desplazamiento del disco articular.

El especialista en Cirugía Oral y Maxilofacial del Hospital Universitario Hospiten Sur, el doctor Óscar Miguel Altura Guillén, explica que este tipo de alteraciones pueden nacer debido a distintos factores. “Por un lado, la disfunción mandibular puede derivar de patologías previas del paciente como el bruxismo, la maloclusión dental o la artritis reumatoide. Pero, también puede darse como consecuencia del estrés o de algún tipo de traumatismo”, aclara.

Antes de determinar el tipo de tratamiento necesario, el paciente tendrá que someterse a un examen médico para valorar la solución que mejor se adecúe, destacando el tratamiento conservador, el tratamiento psicológico y, en última instancia, el tratamiento quirúrgico. Altura Guillén afirma que “en casos extremos, Hospiten suele apostar por la artrocentesis mediante el lavado espacio articular de la ATM con una solución salina que elimina productos inflamatorios y libera las adherencias de la zona”.

Como principal causante de este tipo de patologías se encuentra el bruxismo, una parafunción oral que consiste en apretar los dientes de forma involuntaria principalmente durante las horas de sueño. “Este tipo de trastorno suele tratarse con tratamientos multidisciplinarios como las férulas oclusales, ejercicios de relajación o con el consumo de antiinflamatorios y relajantes musculares en función de las necesidades de cada persona”, especifica el doctor.

Otra de las soluciones que se propone para tratar futuros problemas relacionados con la ATM es la implementación de botox en pacientes con bruxismo para evitar que se produzcan daños en la articulación. El especialista afirma que las sustancias que contiene la inyección ayudan a disminuir la fuerza que ejerce el paciente a la hora de apretar la mandíbula, además de aliviar el dolor tensional y de proteger los dientes ante el desgaste excesivo.

Hospiten reafirma su compromiso con la mejora continua y la innovación médica, incorporando técnicas como la artrocentesis. Esta apuesta por soluciones mínimamente invasivas refleja su objetivo de ofrecer una atención más eficaz, segura y centrada en el bienestar del paciente. El grupo sanitario continúa trabajando para mantenerse a la vanguardia, mejorando de forma constante la calidad de sus servicios.