La obesidad mórbida
Los seres vivos tienen que incorporar elementos del exterior para satisfacer las necesidades metabólicas. Estos elementos son los alimentos, que contienen energía y más de 50 nutrientes. La energía es tan necesaria como los nutrientes pero, si no se consume, se almacena y puede llegar a producir sobrepeso y obesidad.
Por otro lado, si se restringen los alimentos para compensar un bajo gasto energético, se compromete la incorporación de esos nutrientes, que son imprescindibles para un correcto metabolismo y se desencadenan impulsos para adquirirlos prácticamente irrefrenables.
Para cerrar el círculo vicioso de la patogenia, se ha observado que el gasto energético se reduce en las personas obesas, ya que el ejercicio físico es cada vez más escaso, así como la termogénesis y el metabolismo basal.
En el sobrepeso y en los primeros niveles de obesidad el tratamiento se basa en dieta y ejercicio, siempre bajo control médico.
Pasados ciertos niveles de Índice de Masa Corporal (IMC), el tratamiento recomendable es el quirúrgico. La eficacia de la cirugía de la obesidad es muy alta y depende de la técnica aplicada y del seguimiento a corto y largo plazo.
La cirugía bariátrica es la técnica más efectiva y segura para el tratamiento de la obesidad mórbida por encima de ciertos niveles. Es una cirugía muy eficaz y con ella se logra una reducción del peso en todos los casos. Pero el objetivo principal es el equilibrio metabólico y energético a largo plazo, para lo que se requiere un peso objetivo y un seguimiento médico del paciente, además de una buena información y aprendizaje para el paciente. Además de lograr una reducción del peso del paciente, favorece la remisión de las patologías y complicaciones asociadas a la obesidad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera la obesidad una epidemia que causa alrededor de tres millones de muertes cada año en todo el mundo y, en concreto, en Canarias existe un 17% de prevalencia de obesidad en personas con indicación quirúrgica.
La obesidad es un problema de salud de primer orden que afecta a la humanidad a escala mundial. Viene derivado de la transformación del estilo de vida actual, donde de manera general el ocio y el trabajo son aspectos más intelectuales que físicos, con aporte de energía exógena que impide consumir la energía propia. Es una enfermedad que surge de una gestión inadecuada de la energía.
La cirugía bariátrica o de la obesidad modifica el aparato digestivo para que durante un periodo de tiempo limitado el balance energético sea negativo y se pierdan los depósitos de grasa acumulados.
Existen varias técnicas quirúrgicas y la elección de la más adecuada para cada paciente será siempre indicada por el especialista.
La técnica del bypass gástrico está siendo la más efectiva para conseguir una mejor calidad de vida y persistencia de los resultados a largo plazo. Consigue además la desaparición o mejoría de muchas de las patología acompañantes.
Hay que tener en cuenta que el paciente que presenta problemas de sobrepeso se siente atrapado en su enfermedad, que se hace crónica y progresiva. En cambio, una vez que acceden a este tipo de tratamientos, los pacientes observan que después de la operación logran adelgazar y sostener en el tiempo el descenso de peso debido a que están limitados en la ingesta y absorción de la energía. En este sentido, precisamente el objetivo del tratamiento es hacer capaz al paciente de ser y estar equilibrado en el manejo de su propia energía.
De forma paralela, los pacientes pueden ver como remiten tras la cirugía otro tipo de enfermedades, como por ejemplo la diabetes, lo que para los especialistas es otro dato a tener en cuenta a la hora de evaluar la efectividad de este tipo de intervenciones.