La detección del principio de cataratas puede resultar complicada para quienes las padecen. La pérdida o empeoramiento de la vista no se produce de forma brusca o inmediata, por eso es necesario realizar una revisión periódica para chequear el estado de la salud visual.
En este post veremos:
- El principio de cataratas
- Cómo se produce una catarata
- Primeros síntomas en aparecer
- Qué hacer si tienes principio de cataratas
- Cómo se tratan las cataratas
Principio de cataratas
Las cataratas se generan cuando el cristalino, una lente que se encuentra dentro del ojo, pierde su transparencia y se vuelve opaca. Esta opacidad dificulta la entrada de la luz, y por tanto, empeora la visión progresivamente.
Una catarata en estado avanzado genera una pérdida importante de visión. Sin embargo, en las primeras etapas puede pasar por alto a quien la sufre.
Es importante realizar de forma regular chequeos de la salud visual, no sólo para revisar el estado del cristalino del ojo y la posible aparición de cataratas, sino la detección temprana de otras afecciones severas como la hipertensión ocular, el glaucoma, etc.
Cómo se produce una catarata
Las cataratas se producen cuando se adhiere en el cristalino tejido epitelial ocular, que puede ser fruto de la edad, un golpe o traumatismo, o dolencias como la hipertensión ocular o la diabetes. El uso prolongado de altas dosis de corticoides también puede degenerar en la aparición de cataratas.
Dependiendo del tipo de catarata que estés desarrollando la sintomatología variará ligeramente, por ejemplo, hay diferencias entre las manifestaciones de las cataratas nucleares y las cataratas corticales porque la opacidad del cristalino se produce en localizaciones distintas.
Si tienes más de 60 años tus probabilidades de desarrollar cataratas se incrementan y por lo tanto, es importante que pongas atención a cambios en tu agudeza visual.
Si superas los 80 años de edad, las posibilidades de aparición de las cataratas alcanzan casi el 100%.
Primeros síntomas en aparecer
Entre los síntomas vinculados al principio de cataratas destacan:
- Dificultad para ver con nitidez en ambientes con poca luz
- Deslumbramiento ante objetos brillantes
- Pérdida de la percepción del brillo o intensidad del color de los objetos
- Dificultad para leer
- Problemas para reconocer caras
- Aparición de visión doble o de múltiples imágenes en un solo ojo
- Necesidad frecuente de cambio de graduación de gafas y lentes de contacto
- Problemas en la conducción
- Sensación de visión borrosa o con niebla
- Problemas de nitidez al exponerse a pantallas u ordenadores
Qué hacer si tienes principio de cataratas
Si has experimentado más de uno de los síntomas anteriormente descritos es hora de llamar a tu consulta de oftalmología. Es necesario un diagnóstico elaborado por un profesional, que determine si realmente padeces cataratas. Pese a lo que muchas personas creen las cataratas no se perciben a simple vista y sólo un equipo de profesionales de la oftalmología pueden confirmarlas.
Las pruebas necesarias para diagnosticar incluyen un examen con lámpara de hendidura con las pupilas dilatadas y pruebas de agudeza visual.
En la actualidad, la recomendación es corregir las cataratas lo antes posible, para evitar que interfieran en el día a día y la calidad de vida del paciente.
Cómo se tratan las cataratas
No existen tratamientos capaces de frenar el avance de las cataratas, sólo se pueden corregir con cirugía. Aunque sí que pueden reducirse las posibilidades de aparición de estas a partir de elecciones saludables, como una dieta equilibrada, una actividad física moderada regular o no fumar ni beber.
La operación de cataratas es una intervención ambulatoria y con una recuperación sencilla e indolora. En una intervención que no suele superar la hora de duración, el equipo de cirugía oftalmológica extrae el cristalino dañado y lo sustituye por una lente artificial especialmente diseñada para ello.
El paciente se encuentra consciente durante toda la intervención, y solo se aplica una sedación ligera para evitar molestias o dolores. Las incisiones son minúsculas y la cicatrización suele ser rápida.
Tras la operación de cataratas el ojo debe adaptarse a la nueva lente, así que recuperará la nitidez visual de forma progresiva en los días siguientes a la cirugía.
Los cuidados postoperatorio son simples:
- Descansar y evitar esfuerzos tras la cirugía
- No frotar, presionar o tocar el ojo intervenido
- Seguir el tratamiento pautado de gotas antiinflamatorias y antibióticas
- Vigilar posibles sangrados o enrojecimientos persistentes
- Acudir a las revisiones médicas estipuladas
- Evitar coger peso o hacer deporte en las semanas siguientes
- No sumergir la cabeza en piscinas, jacuzzis, etc.
- No usar maquillaje en la zona que rodea a los ojos
Una de las grandes ventajas de la cirugía de corrección de cataratas es que no volverán a aparecer. Las lentes están diseñadas para mantenerse en condiciones óptimas durante toda la vida del paciente.
Además, durante la intervención se pueden corregir otros problemas de refracción como el astigmatismo o la presbicia. La agudeza visual recuperada hace que no sea necesario el uso de gafas o lentillas.