Blog Hospiten

Neuromonitorización del nervio recurrente en cirugía tiroidea y paratiroidea

Publicado el 12-09-2024

En toda operación de tiroides, en la que se extirpa total o parcialmente esta glándula, es fundamental no dañar el nervio laríngeo recurrente (NLR), pues su lesión puede ocasionar desde una afonía leve o severa a dificultades para deglutir o respirar.

La Neuromonitorización intraoperatoria del nervio laríngeo recurrente facilita la identificación de las estructuras anatómicas en cirugía endocrina cervical, disminuyendo así la frecuencia de parálisis de las cuerdas vocales.

La mayoría de los autores coinciden en que el patrón oro para la reducción del daño del NLR es su identificación visual, condicionando el uso de la Neuromonitorización con los recursos de los que disponga el centro.

La lesión o disfunción del(NLR) unilateral o bilateral es una posible complicación en la cirugía de tiroides, con incidencia muy variable según las series, 4,3 %, y del 0.2 al 0.6 %, respectivamente dependiendo de diversos factores como el tipo de enfermedad, la técnica y extensión de la cirugía, características del paciente, experiencia del cirujano o el empleo de neuromonitorización intraoperatoria (NMIO). El daño nervioso puede producirse por sección, tracción, compresión, pinzamiento, succión o térmico.

La parálisis bilateral del Nervio laríngeo recurrente (NLR) tiene gran repercusión sobre el paciente ya que se asocia a insuficiencia respiratoria que puede precisar reintubación y traqueotomía, puede asociarse a trastornos de la deglución y afectar a la calidad de vida.

No obstante, estudios recientes indican que la Neuromonitorización como complemento a la identificación visual puede ayudar a reducir la parálisis del NLR, y, es cada vez un método más aceptado y estandarizado. Se ha demostrado que es un método seguro y útil para estimar la función posoperatoria del NLR

Los sistemas de NMIO disponen de un sistema de estimulación (intermitente o continuo) y un sistema de registro para evaluar la respuesta neuromuscular de las cuerdas vocales; el más utilizado es sistema de estimulación intermitente y registro con electrodos en la superficie del tubo endotraqueal.

La base de esta tecnología se basa en unos electrodos colocados en el tubo endotraqueal que coloca el anestesista que recogen la actividad de las cuerdas vocales durante la cirugía. Esta actividad secundaria a la estimulación intraoperatoria del NLR o del nervio vago (que es de donde proviene este nervio), nos dará unos parámetros que se reflejan en un monitor. Gracias a este aparato, durante la intervención podemos confirmar que lo que hemos localizado es el NLR y que se encuentra funcional. Esto que es útil en toda cirugía cervical, cobra mayor importancia en cirugías extensas por cáncer o bocios grandes o reintervenciones en las que en ocasiones la identificación nerviosa está dificultada por la fibrosis inherente a las intervenciones previas.

Por tanto, la utilización de la Neuromonitorización nos permite realizar cirugías más seguras, al permitir identificar correctamente el nervio laríngeo recurrente en todo su trayecto, de tal forma que evitamos o disminuimos su lesión y las consecuencias de esta como la disfonía temporal o permanente y complicaciones más graves como la insuficiencia respiratoria.

 

Dr. Manuel Barrera Gómez. Jefe sel Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Universitario Hospiten Rambla.