Con motivo de la celebración del Día Nacional de la Espondilitis Anquilosante, el reumatólogo de Hospiten José Luis Rosales explica que esta enfermedad reumática de tipo inflamatorio afecta sobre todo a los jóvenes
Santa Cruz de Tenerife, 19 de octubre de 2015. El Grupo Hospiten, con motivo de la conmemoración este martes, 20 de octubre, del Día Nacional de la Espondilitis Anquilosante, recuerda la importancia del seguimiento de unos hábitos de vida saludables para mejorar su pronóstico, teniendo en cuenta que se trata una enfermedad frecuente (0,5-1% de la población mundial) con una incidencia superior entre varones entre los 20-30 años de edad.
El reumatólogo de Hospiten, José Luis Rosales, explica que la espondilitis anquilosante es una enfermedad reumática de tipo inflamatorio que afecta sobre todo a gente joven o de mediana edad y, aunque no se puede prevenir la aparición de la enfermedad, la realización de un diagnóstico precoz y el ejercicio regular pueden mejorar considerablemente su pronóstico.
Esta enfermedad reumática evoluciona produciendo brotes o ataques de inflamación de las articulaciones de la columna vertebral o de otras articulaciones como los hombros, las caderas, las rodillas o los tobillos. Además, el efecto acumulativo de los brotes inflamatorios en la columna, a largo plazo, produce un daño estructural que como consecuencia puede derivar en pérdida de movilidad.
Por ello, “uno de los pilares más importantes en el tratamiento de la Espondilitis es la realización de ejercicios físicos orientados a fortalecer la espalda, para evitar la rigidez y la pérdida de movilidad de la columna vertebral, ya que la práctica deportiva permite la extensión de la espalda y que se mantenga la movilidad de los hombros y caderas”, añade el especialista.
Actualmente no existe ningún tratamiento capaz de curar la enfermedad. Sin embargo, sí existen una serie de medicamentos eficaces y técnicas de rehabilitación que ayudan a aliviar el dolor y permiten mantener una buena movilidad, con el objetivo de lograr una buena calidad de vida. “También están disponibles en la actualidad los llamados tratamientos biológicos, que son medicamentos dirigidos específicamente contra los componentes de la respuesta inmunológica de la enfermedad, que están indicados en un grupo específico de pacientes”, aclara Rosales.
El reumatólogo de Hospiten también alerta de que existen personas que pueden estar padeciendo la enfermedad sin ser conscientes de ello ya que se pueden confundir los síntomas de un dolor de espalda de tipo mecánico con los de tipo inflamatorio propios de la espondilitis anquilosante, por lo que insiste en consultar siempre con su especialista para favorecer un diagnóstico precoz.