Los últimos avances ofrecen una solución a la presbicia mediante la lente intraocular multifocal.
La vista cansada consiste en la dificultad de ver de cerca y se trata de un trastorno muy común e inherente a la edad que suele iniciarse entre los 45 y 50 años, llegando a afectar al 100% de las personas mayores de 50 años. Los síntomas se suelen manifestar mediante la dificultad de ver objetos cercanos pequeños, la necesidad de alejarlos para enfocarlos mejor o tener que aumentar la iluminación. Como apunta el Dr. Roberto Santos del Servicio de Oftalmología de HOSPITEN, estos síntomas aparecen antes en aquellas personas hipermétropes, luego en los emétropes, es decir, en los que no necesitan gafas de lejos, y finalmente en los miopes.
El Dr. Santos explica cómo la presbicia viene provocada por el envejecimiento natural del ojo ya que el cristalino, que es una lente elástica que se encuentra detrás de la pupila, se va "endureciendo" con el paso del tiempo y perdiendo por tanto la elasticidad que le permite cambiar de forma para enfocar a distintas distancias. Al tratarse de un proceso natural, es una condición óptica que, tarde o temprano, afecta a todo el mundo sin excepción.
Los grandes avances que han habido en el diseño de lentes intraoculares, han permitido el desarrollo de la lente intraocular multifocal; hecho éste que lleva a afirmar al Dr. Santos que sí existe, actualmente, una solución para la presbicia o vista cansada con resultados altamente satisfactorios para el paciente. Esta lente multifocal se implanta en el paciente mediante una intervención ambulatoria bajo anestesia local. En dicha intervención se sustituye el cristalino por la lente multifocal y el paciente puede proseguir su vida normal desde ese mismo día.
Si bien la indicación final de la intervención vendrá dada por el especialista en función de las características personales del paciente, el Dr. Santos comenta que aquellas personas que suelen ser candidatas a esta operación son principalmente: pacientes que van a operarse de cataratas y desean eliminar la presbicia en el mismo acto quirúrgico, pacientes que no padecen cataratas pero desean prescindir de sus gafas de cerca independientemente que tengan miopía o hipermetropía previa y pacientes jóvenes con cataratas congénitas o unilaterales