Con la llegada de septiembre muchas son las familias que se enfrentan a los preparativos de un nuevo curso escolar. Con el fin de paliar el estrés añadido que en muchos casos supone este periodo, la Dra. Victoria García, pediatra del Hospital Universitario Hospiten Rambla, ofrece una serie de recomendaciones con las que la adaptación a la rutina sea más sencilla y paulatina.
En primer lugar, la Dra. García considera que es importante comenzar la adaptación a la rutina dos semanas antes. Irse a dormir más temprano y levantarse a la hora a la que lo harán durante el curso será clave para adaptarse a la vuelta a la normalidad. Algo en lo que también influyen los horarios de las comidas y el retomar una dieta más equilibrada y saludable.
Anticiparle a los niños cómo será su día a día rebajará sus niveles de incertidumbre. Narrarles la futura experiencia y resaltar los aspectos positivos de ésta les ayudará a tener una visión más clara de lo que van a encontrarse. Asimismo, recorrer el camino que harán diariamente les ayudará a familiarizarse con el entorno.
Otra de las principales recomendaciones sería involucrar a los más pequeños en los preparativos como la compra de libros o la preparación del uniforme. Además, leerles algún cuento en relación con la vuelta al cole hará que se sientan identificados y normalicen su experiencia.
En este sentido, la Dra. Victoria García destaca que “validar sus emociones se vuelve clave”. Tratarlos con empatía y evitar frases que no vayan en consonancia con su proceso como el “no llores que el colegio es divertido”. Para que se sientan aún más comprendidos, es interesante planificar una cita con sus compañeros unos días antes. Así comenzarán a hacerse con el entorno en una situación de apoyo junto a padres y compañeros.
De cara al primer día de colegio, es importante realizar todas las actividades con tiempo. Llevar a cabo una rutina calmada en la que desayunen y se preparen sin prisas mientras los padres muestran una actitud positiva. Actitud que debe mantenerse a la hora de las despedidas, donde se invita a los padres siempre a despedirse de los niños de manera calmada, sin dramatizar ni eternizar el momento.
Por último, con relación a los niños con más apego, la Dra. Victoria García recomienda utilizar un objeto o un símbolo de conexión. Dejar a los niños una pulsera, muñeco o detalle que le recuerde a sus padres y les haga sentir que están con ellos.