Hospiten Blog

¿Cuáles son las causas principales de la pérdida de visión?

Posted on 08-02-2022

Existen múltiples causas para la pérdida de visión. Sin embargo, existen algunas causas frecuentes y recurrentes en la mayoría de los casos de pérdida de visión y/o agudeza visual.

 

Síntomas que alertan de la pérdida de visión
 

En muchas ocasiones la pérdida de visión se produce de forma gradual, con pequeñas afecciones y dificultades en la realización de tareas cotidianas. Si te resulta difícil ver la televisión, conducir, leer, trabajar en el ordenador o reconocer a personas es muy probable que estés desarrollando un problema de visión. 

Puede tratarse de una dolencia de tratamiento sencillo como los problemas de refracción, que permiten solventar los síntomas con gafas o lentes de contacto, y en los casos más complejos con cirugía. Pero, los síntomas ligeros también pueden ser los indicios de una afección de la visión más grave. 

Ante la detección de cualquier tipo de modificación en la agudeza visual es importante que acudas a una consulta de oftalmología para obtener un diagnóstico certero y adecuado.

 

Las mejores formas de prevenir la pérdida de visión

 

Principales causas de la pérdida de visión
 

  • Problemas de refracción
  • Cataratas
  • Degeneración macular por envejecimiento
  • Retinopatía diabética
  • Glaucoma
  • Tracoma
  • Desprendimientos de retina

 

Problemas de refracción

Para que el ojo realice un buen enfoque la córnea y el cristalino deben encontrarse en condiciones óptimas. Cuando el ojo no puede enfocar bien por la longitud del globo ocular, modificaciones en la forma de la córnea o el daño en el cristalino se producen errores de refracción. 

Entre los problemas de refracción más comunes se encuentran la miopía, hipermetropía o hiperopía, presbicia y/o astigmatismo.

Los síntomas más comunes en este tipo de dolencias son la visión borrosa, la visión doble, las nebulosas, la detección de halos rodeando a luces brillantes, los dolores de cabeza o la fatiga visual. 

Las gafas y las lentes de contacto suelen ser suficientes para recuperar la agudeza visual. De forma permanente se pueden tratar estas dolencias cuando hay altas dioptrías con cirugía láser. 

 

Cataratas

Es una de las causas de pérdida de visión más frecuentes en personas mayores de 60 años. A partir de los 80 años, casi el 100% de la población desarrolla cataratas y la pérdida de visión asociada. 

Las cataratas se generan cuando el cristalino pierde su transparencia y se vuelve opaco. La causa más habitual de la aparición de las cataratas es la edad, de forma progresiva se adhiere tejido en el cristalino hasta opacarlo. Pero, también puede producirse por un consumo prolongado de corticoides, enfermedades como la diabetes o golpes y traumatismos. 

En el caso de las cataratas la pérdida de visión puede comenzar siendo parcial, pero a medida que avanzan la visión se vuelve más difícil hasta alcanzar una pérdida de visión total en los estadíos más avanzados.

El único tratamiento eficaz para las cataratas es la cirugía. Es necesario reemplazar el cristalino dañado por una lente artificial que deje pasar la luz de forma correcta. 

 

Degeneración macular por envejecimiento

La degeneración macular por envejecimiento no suele suponer una pérdida de la visión completa, pero sí que ataque a la agudeza de la visión central, generando una pérdida de visión importante. 

La mácula es la parte del ojo que permite ver los detalles, y si se ve afectada se pierde nitidez. 

Suele aparecer en personas de más de 50 años de edad. 

 

Retinopatía diabética

La pérdida de visión vinculada a la retinopatía diabética se caracteriza por la aparición de manchas en la vista, visión borrosa, visión oscura o pérdida de agudeza visual. 

Los niveles elevados de glucosa en sangre de forma repetida y prolongada generan la obstrucción de los vasos que irrigan la retina, así que no recibe suficiente sangre. Para compensar esta carencia el cuerpo intenta generar nuevos vasos, pero se suelen crear de forma inadecuada y pueden sangrar con facilidad.

Existen tratamientos para frenar el avance de la retinopatía diabética, pero ninguno puede curarla. 

La mejor prevención para que no aparezca la pérdida de visión vinculada a la retinopatía diabética es el control adecuado de los niveles de azúcar en sangre. 

 

Glaucoma

Esta dolencia se relaciona con el daño del nervio óptico y se suele producir por una presión ocular más alta de lo normal. El glaucoma es de las principales causas de ceguera en personas de más de 60 años.

Pese a que la enfermedad puede surgir en cualquier etapa de la vida, es más común en edades avanzadas. 

El avance del glaucoma es tan lento y paulatino que suele costar detectarlo. 

Una vez que se ha producido una pérdida de visión avanzada por el glaucoma no se puede recuperar. Por lo que es fundamental diagnosticarlo en etapas tempranas. Si el glaucoma no está muy avanzado se puede frenar para retardar su progresión. 

 

Tracoma

El tracoma es una dolencia ocular generada por una infección bacteriana. Es contagioso y se extiende por el contacto con ojos, párpados y secreciones de personas que lo padecen. 

Un tratamiento en las primeras manifestaciones de la enfermedad evita complicaciones mayores. 

El tracoma es más frecuente y está más extendido en el continente africano. 

Los primeros síntomas son:

  • Picazón e irritación de ojos y párpados
  • Secreciones oculares con pus
  • Inflamación de párpados
  • Fotofobia
  • Dolor de los ojos y enrojecimiento
  • Pérdida de visión

La ceguera por tracoma es prevenible y se puede tratar con antibióticos o con cirugía.

 

Desprendimientos de retina

El desprendimiento de retina no resulta doloroso y sólo se manifiesta con problemas de pérdida de visión como:

  • Destellos luminosos y percepción de moscas flotantes
  • Defecto en el campo visual, con apariencia de telón negro
  • Pérdida de visión central. En casos avanzados donde la dolencia también afecta a la mácula.
  • Pérdida rápida de visión o pérdida total de la visión de un solo ojo

Esta dolencia aparece cuando se combina un vítreo licuado con una rotura o desgarro de la retina. 

El desprendimiento de retina se diagnostica revisando el fondo del ojo con la pupila dilatada y su tratamiento requiere cirugía, normalmente abordados con láser o crioterapia. 

 

Cuándo contactar con un médico
 

Ante cualquier síntoma de pérdida de visión, visión borrosa o dificultades en tareas cotidianas como la lectura o la conducción debes acudir a una consulta de oftalmología. Sólo así recibirás un diagnóstico fiable y podrás recibir un tratamiento adecuado y efectivo.

 

Las mejores formas de prevenir la pérdida de visión