Es normal que los padres se hagan altas expectativas en relación a desarrollo de sus hijos, que este sea normal y sano, sin embargo, no hay forma de evitar que un niño nazca con necesidades físicas o mentales especiales, tampoco existe la total seguridad de que este se desarrolle en forma normal.
Si bien la estimulación durante los primeros años de vida es fundamental, no hay que olvidar que es importante tener un control periódico del embarazo y del parto. Expertos en neurología infantil señalan que existen algunas afecciones neurológicas en las que el diagnostico precoz permite un tratamiento mas adecuado y un mejor pronostico para el futuro y desarrollo del niño.
Es a través de la Neurología Infantil, especialidad médica que se encarga de prevenir, diagnosticar y tratar todas aquellas patologías y trastornos que afectan al sistema nervioso central y nervios periféricos (cerebro, médula espinal y todos los nervios periféricos), desde el embarazo hasta la adolescencia. En muchas ocasiones (y a causa del diagnostico oportuno) evita o detiene la progresión del daño neurológico.
¿Qué niños deben ser evaluados por el Neurólogo?
- El niño prematuro, por ser este niño de mayor riesgo Neurológico.
- El niño que presenta al nacer: encefalopatía hipóxico isquémica, convulsiones neonatales, parálisis braquial, parálisis facial, apneas o infecciones congénitas.
- El niño que presenta retraso en su desarrollo psicomotor, ejemplo el niño que no sujeta la cabeza a los tres meses de vida, no se sienta a los seis meses, no camina a los 14 meses, no dice palabras o no entiende órdenes simples después del primer año de vida.
- El niño que no logra establecer un patrón de sueño apropiado.
- El niño que no se contacta bien o no establece lazos afectivos, extremadamente irritable.
- El niño que pierde alguna función adquirida en su desarrollo o se estanca en su desarrollo.
- El niño muy blando que toma posturas anómalas.
- El niño que no presenta un patrón de crecimiento apropiado pondoestatural y de su circunferencia craneana.
- El niño que presenta retraso de lenguaje, vocabulario escaso, mala pronunciación, dificultad en la comprensión de órdenes.
- El niño que presenta bajo rendimiento escolar, rechazo escolar.
- El niño que se queja de dolor de cabeza, o de vértigo.
- El niño que presenta una alteración de la marcha, se cae frecuentemente, se fatiga muy fácilmente o con debilidad muscular.
- El niño torpe motriz, al que se le caen las cosas, se tropieza con nada.
- El niño que se desmaya.
- El niño con tics.
- El niño que presenta convulsiones con o sin fiebre.
- El niño que presenta un cambio en su conducta habitual.
- El niño portador de malformaciones congénitas, de síndromes genéticos o de enfermedades metabólicas.
- El niño portador de parálisis cerebral.
Áreas de trabajo:
- Epilepsia
- Trastornos del sueño
- Cefaleas
- Síndrome de Déficit atencion con o sin hiper actividad
- Enfermedades neuromusculares
- Enfermedades cerebrovasculares
- Desarrollo psicomotor y del lenguaje
- Dificultades de aprendizaje
- Neurorehabilitación
- Traumatismos craneoencefálicos
- Enfermedades de la columna y medula espinal