Hospiten recomienda moderación en las comidas de Navidad, ya que durante esta época del año es habitual abusar de ingestas copiosas, grasas y alcohol, lo que suele provocar trastornos digestivos de diversa índole.
Es importante controlar los excesos y, especialmente, hay que prestar mayor atención y control a las personas que ya tienen patologías digestivas, como por ejemplo, la gastritis crónica y la enfermedad por reflujo, y que durante estas fechas se ven incrementadas de forma considerable.
Con respecto a las recomendaciones, es necesario incluir actividad física de forma regular ya que ayuda a regular el tránsito digestivo; evitar comer rápido y sin masticar bien los alimentos; introducir frutas y verduras para equilibrar la dieta con productos más irritantes consumidos en estas fechas como los embutidos, el marisco y el alcohol; dejar de comer cuando se tenga la sensación de saciedad; y evitar dormir después de las comidas para dar tiempo a realizar de forma adecuada el proceso de digestión.
Por otro lado, es recomendable mantener unos hábitos alimentarios adecuados también durante estas fechas, ya que las celebraciones de Navidad, en ocasiones, pasan factura y acaban con una visita al médico debido a gastritis, gases, hinchazón o dolor abdominal con o sin alteración de las deposiciones.
Desde Hospiten se aclara que no es necesario renunciar a las comidas, ni a los brindis con familiares y amigos en Navidad, pero sí insiste en hacerlo de forma equilibrada manteniendo los hábitos saludables, lo que favorecerá una celebración sin consecuencias negativas para la salud.