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Tras la relajación propia de las vacaciones, llega el momento de volver a cuidarse para quitarnos esos kilos de más que suelen cogerse en el periodo estival. Os contamos cómo podemos hacerlo

Se recomienda evitar una ganancia de peso corporal exagerada para prevenir y evitar complicaciones durante el embarazo o el parto. En general, es fundamental la ingesta de comida sana estilo “dieta mediterránea”, preferiblemente comidas caseras frescas, evitando comida ultra procesada. Lo ideal es consumir productos frescos de temporada y de la tierra.

Las vacaciones son el momento ideal para desconectar, romper con la rutina y sobre todo descansar, tanto física como mentalmente. Nuestro día a día, el trabajo, la familia, el ir contrarreloj, comer con prisas… Todo esto puede llegar a ser muy estresante y alterar nuestros hábitos alimentarios. Por eso, durante las vacaciones es nuestro momento de cuidarnos. No es momento de contar calorías, ni de restricciones, pero tampoco es imposible comer de forma saludable.

Tal vez sea un buen momento para aprovechar y fomentar hábitos saludables en nuestros hijos.

Sabemos por estudios recientes (y porque es más que evidente) que la obesidad está aumentando de forma alarmante, incluso en niños, y una de las causas es la ingesta excesiva de azúcar.

Y no nos referimos solo al azúcar que añadimos a la leche o al café, sino la que consumimos sin darnos cuenta cada vez que tomamos una galleta o un zumo.